El paramédico Josué Acevedo fue uno de los paramédicos que, en un acto heroico, salvó la vida de los tres niños que fueron impactados por un rayo en Isabela.
29 de septiembre 2024 (Pro Policía Informa)- En un emotivo relato, Josué Acevedo, un paramédico estatal de Puerto Rico, compartió su inspiradora historia de superación, demostrando que con perseverancia se pueden alcanzar metas inimaginables. Desde una adolescencia difícil, marcada por el fracaso escolar y la falta de dirección, Josué ha logrado posicionarse como instructor del curso de trauma de medicina prehospitalaria en el Negociado del Cuerpo de Emergencias Médicas de Puerto Rico.
Su camino no fue fácil. Después de fracasar tres veces en noveno grado y mudarse de escuela en múltiples ocasiones, tuvo que enfrentarse a situaciones que lo llevaron a tocar fondo, como ver su cuenta bancaria con apenas $63 en su cumpleaños. A pesar de los obstáculos, decidió cambiar su vida y estudiar educación, un esfuerzo que duró solo tres meses debido a un accidente en octubre. Este suceso lo llevó a replantearse su vida y buscar ayuda psicológica. En ese proceso, encontró su verdadera vocación: convertirse en técnico de emergencias médicas (EMT).
Durante su trayecto, se encontró con personas que lo subestimaron y otras que vieron su verdadero potencial. Uno de esos mentores fue Chino Cardona, su antiguo supervisor en la base de Moca, quien le dio palabras de aliento en un momento crucial. «Todos piensan que entraste en el peor momento a emergencias, pero no es así. Entraste en el momento que Dios quiso que entraras», le dijo Chino, palabras que resonaron profundamente en él.
Hoy, ese joven que una vez estuvo perdido y desmotivado es un ejemplo de resiliencia y dedicación. Desde su posición como instructor en la sede principal del Negociado del Cuerpo de Emergencias Médicas, ha demostrado que, cuando se está en el suelo, el único camino posible es hacia arriba.
Pero su compromiso con la comunidad no termina ahí. Josué Acevedo fue uno de los paramédicos que, en un acto heroico, salvó la vida de los tres niños que fueron impactados por un rayo en Isabela. Este incidente, que conmovió a toda la isla, puso en evidencia no solo su valentía y profesionalismo, sino también su dedicación incansable para salvar vidas.
Con un mensaje de esperanza y apoyo, recalca que siempre estará dispuesto a extender una mano a quien lo necesite, sin olvidar de dónde vino ni pisotear a nadie en su camino hacia el éxito. Su historia es un recordatorio de que no importa cuán oscuros sean los tiempos, siempre se puede encontrar la luz para salir adelante.
